17 septiembre, 2010

Que vayan sus madres a la huelga

Nota: Este post es simplemente un poco de "echar bilis", así que quien tenga que perdonar, que me perdone el tono usado.

Esto va dirigido a los sindicalistas de pacotilla, a un puñado de inútiles que no sirven para nada, que no cumplen su función y que están chupando del bote, exactamente igual que nuestros políticos. Hace ya 3 años que estamos en crisis y hasta ahora no se les ha ocurrido pensar en una huelga general, en una huelga que pondrá en peligro muchos más puestos de trabajo (a ver quién es el guapo que le dice a su jefe que se pone en huelga, tal y como está el trabajo hoy en España, como para jugársela, con 1100 euros al mes, una hipoteca, la mujer en paro y 3 churumbeles...).

Esos mismos sindicalistas de pacotilla son los que permiten que los controladores aéreos se pongan de huelga cada dos por tres. Sí, personas que no llegan a 35 horas semanales, que cobran miles de euros al mes por estar delante de un "videojuego" (verídico, dicho por un controlador) que ni les da la sensación de que vayan a estar con las vidas de personas en juego, y que no creo que ni lleguen a sudar...

Esos mismos sindicalistas que permiten huelgas de trenes, de autobuses, de basura, de Guardias Civiles y de miles de colectivos más que paralizan España, que hacen que lleguemos tarde al trabajo, a casa por Navidad, que la calle huela a porquería, a detritus, en definitiva: a sindicalista. A esos sí les quitan cada vez más horas de trabajo, les dan cada vez más sueldo, cada vez más tiempo libre, cada vez más libertad para jubilarse... Exacto, igual que al resto, igualito...

UGT y CCOO, escoria que antaño fue refugio del proletariado acosado por la patronal. Hace 15 años por lo menos que no valen para nada, que son simples asociados subvencionados del PSOE, y que ahora en el gobierno no son capaces de decir una palabra más alta que otra. ¡Que vayan sus madres a la huelga! Están permitiendo que Zapatero siga haciendo recortes sociales y que siga acabando con nuestra calidad de trabajo y de vida. Lo permiten porque se les beneficia por otro lado, y porque muchos de ellos son "sindicalistas liberados", es decir que no trabajan porque son unos vagos pero se les paga como si lo hicieran. Creo que sobran las explicaciones, pues toda persona con dos dedos de frente tiene conocimiento de en lo que se han convertido los sindicatos españoles, así que ¡Que vayan a la huelga sus madres!

2 comentarios:

perla dijo...

Algo muy gracioso es que hoy mismo he visto al cabeza de UGT pidiendo a los abuelos que se unan a la huelga y ese día no cuiden a sus nietos ... seguro que los padres que aún tengan trabajo les van a hacer un gran favor ...

Javi dijo...

Es cierto, me hizo mucha gracia al oírlo ayer. Pensé que estarán desesperados porque ven que el seguimiento de la huelga puede acabar siendo nulo.

Yo creo que acabaremos viendo cómo le dicen a los niños de 7 años que hagan huelga, que lo hagan por su país, por su patria y no sé qué más. Suerte que tienen ellos que no entienden de patrias, más allá del país de los Gormiti y el Patito Feo.